Hay veces que más vale contar hasta diez para no decir o escribir lo primero que se le viene a uno a la cabeza. He tenido que contar, y hasta treinta, antes de empezar a teclear pues creo que este gobierno municipal con el Sr. Antonio Casimiro Gavira a la cabeza ha rebasado ya los límites de lo razonablemente permisible.
No me estoy refiriendo al gravísimo asunto de la acusación de falsificación de firmas y fechas en un documento de notificación cometido desde la Delegación de Comunicación, a la que llamaré desde ahora Delegación de Propaganda y Culto al Jefe (DPCJ). Y no lo hago porque estoy a la espera de una rectificación que ya está tardando (en publicar el documento para intentar acusarme de mentiroso no tardaron tanto) por parte del alcalde. En 23 páginas que tiene el panfleto propagandístico que edita la DPCJ no ha tenido a bien hacerlo. Por supuesto, en caso de no recibir ningún tipo de explicación, procederemos a utilizar los instrumentos que la ley nos ofrece a fin de esclarecer los hechos denunciados. Y que quede constancia de que las responsabilidades no las pediremos sobre un funcionario municipal, que hace lo que le mandan, sino sobre los cargos políticos que son sus superiores.
Hablo del último atentado a la salud democrática en Mairena que es el lanzamiento del nuevo número del Mairena Información (o Subordinación). La foto a toda portada del líder supremo y un titular con grandes caracteres.
El culto y la propaganda del que será el candidato a la alcaldía por el PSOE (esto es, el mismo partido que ha llevado al país a la grave situación de déficit y desempleo que padecemos) no nos produce ningún asombro ya a estas alturas. Lo que me saca de quicio es la falta de pudor a la hora de presentarse como paladines del empleo. Son demasiados años ya de inoperancia en política laboral (excepto para los amigotes con carnet) para vender ahora que van a “generar tejido empresarial”.
La única referencia al empleo son las dos fotos de visitas con un texto que sonroja en que se indica que la consecuencia inmediata de dos visitas es que va a ocasionarse un incremento de la plantilla de trabajadores. Tal como se lee. Un insulto en toda regla a la inteligencia humana.
Ya me han comentado varias personas que todo responde simplemente en las urgencias por contraprogramar (como hacen Antena 3 y Telecinco) la visita de Javier Arenas a Mairena. Pero es que el Sr. Arenas, al que espero volver a visitar ya como Presidente de la Junta de Andalucía, vino a tomar buena nota de aspectos específicos de la industria de transformación de productos andaluces, y de Mairena concretamente, como las aceitunas y del aceite. No vino a pasearse con una bata blanca.
No es casualidad su reunión posterior en Bruselas con el presidente de la Comisión Europea, Durao Barroso, para tratar sobre la reforma en ciernes de la Política Agraria Común (PAC).
Y hablando de contraprogramaciones, lo que me produce pánico es viendo como utiliza el panfleto divulgativo este ayuntamiento, lo que haría con una televisión a su servicio (aunque si no hay dinero ni para limpiar calles y parques no van a gastarse dinero en televisión, vamos, eso es lo que dicta el sentido común).
Creo que las cabezas pensantes del DPCJ podrían haberle buscado ya el nombre al futuro informativo en base a su idea de comunicación en igualdad. A imagen del programa televisivo del líder bolivariano amigo de Zapatero, Hugo Chávez, podrían llamarlo ALÓ ALCALDE.
Pero porque esperar mas? El Sr. Alcalde se rie de esas posibles demandas, porque al final aguanta el tiron hasta el final, da marcha atras en el momento oportuno para que no se entere mucha gente y NO PASA NADA.
Si ocurriese al contrario ¿Cuanto tiempo crees que tardarian en demandarte? ¿Crees que en ese caso seria solo apareceria la noticia en medios locales?
Si hay motivos para una demanda (y creo que los hay) demanda y que argumente en los tribunales.