La AMPA del centro agradece al Ayuntamiento su apoyo, pero convoca una huelga para protestar ante la Junta por el retraso de las obras.
Ha comenzado el nuevo curso escolar en Mairena del Alcor, pero no en todos los centros. Todos los colegios de la localidad han visto cómo sus aulas se llenaban de nuevo… menos uno: el CEIP Isabel Rodríguez, cuyos padres dieron la bienvenida al inicio del año escolar con una jornada de huelga que ha afectado a los cerca de 200 niños del centro.
Los miembros de la AMPA del colegio de El Prior se muestran agradecidos por los esfuerzos realizados por el Ayuntamiento, desde donde siempre han encontrado apoyo institucional, y valoran los avances realizados este verano al respecto, pero no las tienen todas consigo al ser preguntados por el compromiso de la Junta de Andalucía de iniciar las obras de la segunda fase del centro de manera “inminente”, y dudan de que esté listo para el curso 2015/16. Los padres, con la desconfianza que otorga la espera de siete años de promesas incumplidas, anhelan el anuncio de la apertura de la fase de licitación como agua de mayo.
«La situación no es que haya mejorado, sino todo lo contrario. Ya es insostenible. Se ha sobrepasado en mucho el límite de las instalaciones de infantil y ya al no existir ningún habitáculo medianamente decente dentro del edificio para adaptarlo como aulas, la junta de Andalucía nos ha instalado en un tercio del pequeño patio de los niños unas caracolas que acogerán dos clases más» señalan los padres en un comunicado emitido a través de internet. Y añaden: “la realidad es que nos han instalado unas caracolas que se come un tercio del patio de los niños. La realidad es que un espacio proyectado para unos 120 niños va a acoger a más de 180 niños. La realidad es que el centro no cumple con la normativa de niños por metros cuadrados, ni con ninguna otra normativa de seguridad.
La realidad es que debido a la tardanza en el inicio de las obras y a todo el papeleo burocrático, no hay tiempo material para que se finalice la segunda fase antes del inicio del curso que viene”. Y añaden en su comunicado: “para ellos, la calidad en la educación es que cada niño andaluz tenga una silla y un pupitre. Da igual que dicha silla y pupitre estén en un aula, en un pasillo o en una sala de profesores, y que para disfrutar del patio tengan que habilitar un pedazo de calle aledaña para que los niños tengan espacio suficiente para jugar. Que tengan una biblioteca, gimnasio o salón de actos es secundario, eso son lujos que acompañan a la educación. La calidad la da la silla y el pupitre”.
Mostrando su solidaridad a los afectados se personaron en la jornada de huelga miembros del Equipo de Gobierno: el alcalde Ricardo Sánchez, la concejal de Educación y Cultura Gloria Guillén, y los ediles Federico Trigueros, José Carlos Copete, Juan Manuel López y Patricia Marín.